Eduardo
Galeano nos muestra un poema donde la utopía funciona como las alas de la vida,
Nos invita a delirar un mundo donde la imaginación persista sobre los sentidos, un mudo donde no vivamos
para trabajar pero todos trabajemos para vivir, nos construye un mundo donde la
alegría no sea por lo que tenemos sino por lo que somos, un mundo que nos llene
de orgullo y no de desilusiones, donde no existan frontera.
Me llama la atención este poema porque nos ilusiona
una sociedad existencialista, sin embargo a mi parecer, este tipo de poemas son en el mundo algo
descartable y más en nuestra actualidad donde hay tantos problemas en nuestro
entorno, donde el día a día está lleno de tropiezos y desilusiones que nosotros
mismos provocamos. Debemos concentrarnos en soluciones reales para la
problemática por la que pasamos, adoptando modelos cambiantes y dejando a un
lado contradicciones y utopías..
